En los Lugares Celestiales


En los Lugares Celestiales
Las demandas previas de Dios, 22 de octubre https://ift.tt/lzHpVKu Y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas. Deuteronomio 8:17, 18. Los que aman a Dios por sobre todo, se dan cuenta que son ricos más allá de todo cálculo en las riquezas que Dios les da... El hombre no posee nada a lo que tenga exclusivo derecho. No es dueño ni aun de sí mismo; porque ha sido comprado con un precio: la sangre del Hijo de Dios. Cristo tiene un derecho sobre toda posesión de este mundo. Él puede poner en marcha una serie de circunstancias que arrasen con la ganancia acumulada durante años... Es Dios quien da al hombre el aliento de vida. Nosotros no podemos crearlo. Sólo podemos tomar lo que Dios ha creado. Él es nuestro guardián, nuestro consejero; y más que eso, por su generosa provisión, poseemos toda habilidad, el tacto y la capacidad que tenemos... Todo lo que poseéis es don suyo, pues no teníais nada con que crearlo o adquirirlo. Se os ha dado, no para que llegue a ser una cuña que os separe de él, sino para ayudaros en realizar su servicio. En el momento en que el hombre pierde de vista el hecho de que sus capacidades y posesiones son del Señor, en ese momento está defraudando las posesiones del Señor. Está actuando como un administrador infiel, haciendo que el Señor transfiera sus dones a manos más fieles. Dios demanda a los que él ha confiado sus dones que los administren fielmente, para demostrar al mundo que están trabajando por la salvación de los pecadores. Demanda a los que profesan estar bajo su dirección, que no desvirtúen su carácter... Diariamente él nos colma con beneficios... Llevando la corona de su favor real, glorifiquémoslo, compartiendo con otros la abundancia con que nos ha colmado.—Manuscrito 63, 1901.
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El Cristo Triunfante


El Cristo Triunfante
El poder que conmovió al mundo, 22 de octubre https://ift.tt/xsv1gm4 “Mas esto es lo dicho por el profeta Joel: Y en los postreros días, dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; vuestros jóvenes verán visiones, y vuestros ancianos soñarán sueños”. Hechos 2:16, 17. Después del derramamiento del Espíritu Santo, los discípulos, revestidos de la panoplia divina, salieron como testigos, a contar la maravillosa historia del pesebre y la cruz. Eran hombres humildes, pero salieron con la verdad. Después de la muerte de su Señor eran un grupo desvalido, chasqueado y desanimado, como ovejas sin pastor; pero ahora salen como testigos de la verdad, sin otras armas que la Palabra y el Espíritu de Dios, para triunfar sobre toda oposición... Fueron transformados en carácter y unidos en los lazos del amor cristiano. Aunque carecían de riquezas, aunque eran reputados por el mundo como meros pescadores ignorantes, fueron hechos, por el Espíritu Santo, testigos de Cristo. Sin honores ni reconocimiento terrenal, eran los héroes de la fe. De sus labios salieron palabras de divina elocuencia y poder que conmovieron al mundo. El tercero, cuarto y quinto capítulos de Hechos presentan un relato de su testimonio. Aquellos que habían rechazado y crucificado al Salvador esperaban hallar a sus discípulos desanimados, cabizbajos, y listos para repudiar a su Señor. Con pavor escucharon el claro y valeroso testimonio dado bajo el poder del Espíritu Santo. Las palabras y obras de los discípulos representaban las palabras y obras de su Maestro; y todos los que los oían decían: Han aprendido de Jesús, hablan como él habló. “Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos”. Los príncipes de los sacerdotes y gobernantes se creyeron competentes para decidir lo que los apóstoles debían hacer y enseñar. Al ir predicando a Jesús por doquiera, los hombres eran manejados por el Espíritu Santo e hicieron muchas cosas que los judíos no aprobaban. Había peligro de que las ideas y las doctrinas de los rabinos cayeran en desprestigio. Los apóstoles estaban creando una maravillosa excitación. El pueblo traía a las calles a sus enfermos y a los que eran molestados por espíritus inmundos; las multitudes se reunían en torno de ellos, y los que habían sido sanados pregonaban las alabanzas de Dios y glorificaban el nombre de Jesús, el mismo a quien los judíos habían condenado, escarnecido, escupido, coronado de espinas, y al cual habían azotado y crucificado. Este Jesús era exaltado por encima de los sacerdotes y los príncipes. Los apóstoles aun declaraban que había resucitado de los muertos. Los gobernantes judíos decidieron que esta obra debía ser detenida, porque demostraba que ellos eran culpables de la sangre de Jesús.—Carta 38, 1896.
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Conflicto y Valor


El restaurador, 22 de octubre Lucas 19:1-10. https://ift.tt/LIfVGcv Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. Lucas 19:10. “El principal de los publicanos”, Zaqueo, era judío, pero detestado por sus compatriotas. Su posición y fortuna eran el premio de una profesión que ellos aborrecían y a la cual consideraban como sinónimo de injusticia y extorsión. Sin embargo, el acaudalado funcionario de aduana no era del todo el endurecido hombre de mundo que parecía ser. Bajo su apariencia de mundanalidad y orgullo, había un corazón susceptible a las influencias divinas. Zaqueo había oído hablar de Jesús... En este jefe de los publicanos se había despertado un anhelo de vivir una vida mejor... Sintió que era pecador a la vista de Dios. Sin embargo, lo que había oído tocante a Jesús encendía la esperanza en su corazón. El arrepentimiento, la reforma de la vida, eran posibles aun para él... Zaqueo comenzó inmediatamente a seguir la convicción que se había apoderado de él y a hacer restitución a quienes había perjudicado. Ya había empezado a volver así sobre sus pasos, cuando se supo en Jericó que Jesús estaba entrando en la ciudad. Zaqueo resolvió verle... En presencia de la multitud, “Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, lo vuelvo con el cuatro tanto. Y Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa...”.—El Deseado de Todas las Gentes, 506-508. Hay quienes han tenido muy escasas oportunidades, y han transitado por los caminos del error porque no conocían ningún camino mejor, a los cuales les llegarán los rayos de la luz. Como vinieron a Zaqueo las palabras de Cristo: “Hoy es necesario que pose en tu casa”, así vendrá a ellos la palabra; y se descubrirá que aquellos a quienes se suponía pecadores endurecidos tienen un corazón tan tierno como el de un niño porque Cristo se ha dignado tenerlos en cuenta. Muchos se volverán de los más groseros errores y pecados, y tomarán el lugar de otros que han tenido oportunidades y privilegios pero que no los han apreciado. Serán considerados los elegidos de Dios, escogidos y preciosos; y cuando Cristo venga en su reino, estarán junto a su trono. Palabras de Vida del Gran Maestro, 220.

Cada Día con Dios


No dudemos, 22 de octubre https://ift.tt/3DdGazE Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Filipenses 4:4. Es privilegio de todos los que tienen parte en algún ramo de la obra de Dios, saber que sus pecados están perdonados, y regocijarse en la seguridad de una vida superior en las cortes celestiales. Esta esperanza es más preciosa que el oro, la plata y las piedras preciosas. Manténganla siempre brillante, y traten de compartirla con los demás. Al saber que Dios les sonríe, sus corazones se llenarán de gozo y de paz... Presten atención a esta invitación de Cristo tan llena de gracia: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga”. Mateo 11:28-30. Busquemos todos ese reposo prometido por Cristo. Deben revelar al mundo la verdad de sus palabras. Deben demostrar que al llevar el yugo de Cristo se obtiene genuina felicidad. No deshonren a Dios al dudar de sus palabras. Si creen en él, colaborará con sus esfuerzos, y unidos con él podrán hacer una obra aceptable. Por medio de su justicia impartida podrán escapar de la corrupción que existe en el mundo debido a la concupiscencia. “Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!” ¡Oh, si pudiéramos escuchar más alabanzas a Dios procedentes de corazones agradecidos! Necesitamos cristianos que vivan constantemente a plena luz del sol, y que en toda circunstancia alaben al Señor. Con toda la esperanza y la seguridad que hallamos en las promesas de Cristo, ¿cómo podemos ser infelices? No hay excusa ni justificación para que el cristiano esté descontento. Nunca causen la impresión de que están desilusionados con la senda que Cristo les ha trazado. Nuestros caracteres deben concordar con la imagen de Cristo. Debemos someternos a la ley de Dios en hechos y en verdad. Entonces podrá demostrar por medio de nosotros las bendiciones que se reciben cuando se obedecen los principios de su Palabra. El Rey del cielo está dispuesto a reconocer al alma más humilde que le sirve aquí.—Carta 299, del 22 de octubre de 1905, dirigida a los colaboradores del Sanatorio de Paradise Valley.

Alza tus Ojos


Alza tus Ojos
El evangelio es poderoso, 22 de octubre https://ift.tt/CwibK9X Si es que habéis oído de la administración de la gracia de Dios que me fue dada para con vosotros; que por revelación me fue declarado el misterio, como antes lo he escrito brevemente. Efesios 3:2, 3. Por medio de la revelación divina, se desplegó ante Pablo el plan de salvación ejecutado por Cristo. Llamado por Dios, debía enseñar a los hombres que se hallaban en la desesperación, muertos en pecados y ofensas, que había liberación por medio del Evangelio de Jesucristo. Había vida y poder para alcanzar la santidad. Estas revelaciones otorgaron a Pablo la bendición de un maravilloso conocimiento. Aunque no podía presentar a otros todo lo que él mismo había visto, no obstante fue firmemente establecido en la verdad. Ningún sufrimiento ni burla pudo llevarlo jamás a negar las grandes verdades que le habían sido reveladas. Ninguna teoría falsa pudo apartarlo de la influencia de las magníficas visiones de las cosas celestiales que había recibido. No podía aceptar ideas extravagantes que neutralizaran el efecto de las revelaciones que había recibido de Dios. El Evangelio, tal como lo presentó Pablo en sus escritos, es exactamente tan poderoso hoy como lo fue entonces. A los hombres de todas las edades se dan a conocer los ricos tesoros de la gracia de Cristo, el abundante amor de Dios tal como fue revelado por medio de su Hijo. ¿Podemos apreciar estas verdades en nuestra condición de frialdad y muerte espiritual? El Evangelio de Cristo fue predicado a la nación judía. Si lo hubieran aceptado habrían confirmado su salvación. Al creer en Cristo hubieran podido llegar a ser miembros de la familia real, manifestando a través de los siglos posteriores las riquezas de su gracia. Pero ellos, como nación, rechazaron a Cristo, rehusaron sus ofrecimientos de misericordia, y fueron cortados de la vid original, para que los gentiles pudieran ser injertados. Sin embargo, aún tienen el privilegio de participar con los gentiles de la salvación de Dios. Creer en Cristo obrará en cada hombre una transformación de carácter. Por medio de la gracia transformadora de Cristo, los frutos del Espíritu se muestran en la vida de los que una vez estuvieron muertos en los pecados y transgresiones. Su disposición, sus palabras y sus acciones revelan que son partícipes de la naturaleza divina. Esta gracia maravillosa fue revelada a Pablo, y él trabajó constantemente para que otros conocieran esas verdades salvadoras. El Evangelio fue predicado bajo la dirección del Espíritu Santo tanto al judío como al gentil. La muralla de división que había separado a los judíos fue derribada en Cristo Jesús. “Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu”. 1 Corintios 12:13.—Manuscrito 111, del 22 de octubre de 1906, “Una advertencia contra la formación”.
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A Fin de Conocerle


A Fin de Conocerle
El juego de la vida, 22 de octubre https://ift.tt/nlb14p7 Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos. 1 Corintios 16:13. La obediencia a la verdad de Dios, el vivir siguiendo cada palabra de Dios, bastan para hacernos resistir en estos tiempos malos. Satanás está jugando el juego de la vida por el alma. Hay oportunidades y ventajas que están al alcance de todos para fortalecer las facultades morales y espirituales. La mente puede expandirse y ennoblecerse, y debería hacérsela espaciar en las cosas celestiales. ... A menos que se oriente en dirección al cielo se convertirá en fácil presa de las tentaciones de Satanás a iniciar proyectos y empresas mundanos que no tienen ninguna relación especial con Dios. Se empeñan en esta obra celo, devoción, energía incansable y deseo febril, y el diablo está cerca y se ríe al ver los esfuerzos humanos que luchan con tanta perseverancia por un objeto que nunca conseguirán, que elude su mano. ... Esquemas y proyectos inventados por Satanás entrampan las almas, y pobres y engañados seres humanos van directamente a su ruina con los ojos vendados. .... Hay una salvaguardia contra los engaños y las trampas de Satanás, y es la verdad como está en Jesús. La verdad plantada en el corazón, alimentada por la vigilancia y la oración, nutrida por la gracia de Cristo, nos proporcionará discernimiento. La verdad debe morar en el corazón, y su poder debe experimentarse a pesar de todos los encantamientos engañosos de Satanás, y vuestra experiencia y la mía debe ser que la verdad pueda purificar, guiar y bendecir al alma. El enemigo está tras la huella de cada uno de nosotros, y si queremos resistir las tentaciones que nos asaltan desde adentro y desde afuera, debemos asegurarnos de que estamos del lado del Señor, que su verdad está en nuestros corazones, que vela sobre nuestras almas, lista para hacer sonar la alarma y hacernos actuar contra cualquier enemigo.—Carta 17, 1886.
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A Fin de Conocerle


El juego de la vida, 22 de octubre https://ift.tt/nlb14p7 Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos. 1 Corintios 16:13. La obediencia a la verdad de Dios, el vivir siguiendo cada palabra de Dios, bastan para hacernos resistir en estos tiempos malos. Satanás está jugando el juego de la vida por el alma. Hay oportunidades y ventajas que están al alcance de todos para fortalecer las facultades morales y espirituales. La mente puede expandirse y ennoblecerse, y debería hacérsela espaciar en las cosas celestiales. ... A menos que se oriente en dirección al cielo se convertirá en fácil presa de las tentaciones de Satanás a iniciar proyectos y empresas mundanos que no tienen ninguna relación especial con Dios. Se empeñan en esta obra celo, devoción, energía incansable y deseo febril, y el diablo está cerca y se ríe al ver los esfuerzos humanos que luchan con tanta perseverancia por un objeto que nunca conseguirán, que elude su mano. ... Esquemas y proyectos inventados por Satanás entrampan las almas, y pobres y engañados seres humanos van directamente a su ruina con los ojos vendados. .... Hay una salvaguardia contra los engaños y las trampas de Satanás, y es la verdad como está en Jesús. La verdad plantada en el corazón, alimentada por la vigilancia y la oración, nutrida por la gracia de Cristo, nos proporcionará discernimiento. La verdad debe morar en el corazón, y su poder debe experimentarse a pesar de todos los encantamientos engañosos de Satanás, y vuestra experiencia y la mía debe ser que la verdad pueda purificar, guiar y bendecir al alma. El enemigo está tras la huella de cada uno de nosotros, y si queremos resistir las tentaciones que nos asaltan desde adentro y desde afuera, debemos asegurarnos de que estamos del lado del Señor, que su verdad está en nuestros corazones, que vela sobre nuestras almas, lista para hacer sonar la alarma y hacernos actuar contra cualquier enemigo.—Carta 17, 1886.

¡Maranata: El Senor Viene!


Nos reconoceremos unos a otros, 22 de octubre https://ift.tt/FisrP5R Entonces conoceré como fui conocido. 1 Corintios 13:12. Conoceremos a nuestros amigos como los discípulos conocieron a Jesús. Pueden haber estado deformados, enfermos o desfigurados en esta vida mortal, y levantarse con perfecta salud y simetría; sin embargo, en el cuerpo glorificado su identidad será perfectamente conservada. Entonces conoceremos así como somos conocidos. En la luz radiante que resplandecerá del rostro de Jesús, reconoceremos los rasgos de aquellos a quienes amamos.62El Deseado de Todas las Gentes, 744. Los redimidos se encontrarán y reconocerán a las personas por ellos conducidos al Salvador. ¡Qué bienaventurada plática sostendrán con esos seres! “Yo era pecador—dirá uno—; sin Dios y sin esperanza en el mundo; tú te acercaste a mí y me diste a conocer el precioso Salvador como mi única esperanza”... Otros dirán: “Yo era un pagano que vivía en un país pagano también. Y tú dejaste a tus amigos y tu cómodo hogar para ir a enseñarme cómo descubrir a Jesús y creer en él como el único Dios verdadero. Yo derribé todos mis ídolos y adoré a Dios, y ahora lo veo cara a cara. Estoy salvado para siempre, y podré contemplar eternamente al que amo”... Algunos expresarán su gratitud hacia los que alimentaron a los hambrientos y cubrieron al desnudo. “Cuando la desesperación cegó mi alma con incredulidad, el Señor te envió a mí—dirán—, para que hablaras palabras de esperanza y consuelo. Me trajiste alimento para suplir mis necesidades físicas, y me abriste la Palabra de Dios, haciéndome comprender mis necesidades espirituales. Me trataste como a un hermano. Simpatizaste conmigo en mis pesares y restauraste mi alma magullada y herida, para que pudiera asirme de la mano de Cristo que hacia mí se extendía para salvarme. En medio de mi ignorancia me enseñaste pacientemente que tenía un Padre celestial que velaba por mí. Me leíste las preciosas promesas de la Palabra de Dios. Me inspiraste confianza en el hecho de que Cristo me salvaría. Mi corazón se suavizó y ablandó hasta quebrantarse, al contemplar el sacrificio que Jesús había hecho por mí... Y aquí me tienes, salvado eternamente para vivir siempre en su presencia y alabar al que entregó su vida por mí”. ¡Qué regocijo sentirán esos redimidos al encontrarse y saludar a los que se preocuparon por su salvación!... ¡Cuánto gozo y satisfacción sentirán palpitar en su corazón!63The Review and Herald, 5-1-1905.

Sabbath School


Comentarios Elena G.W https://ift.tt/bsBzJW8 La Biblia atribuye mucha importancia a la práctica de la hospitalidad. No solo ordena la hospitalidad como un deber, sino además presenta numerosos ejemplos del ejercicio de esta gracia y las bendiciones que reporta. Entre ellos se destaca el caso de Abraham. En el libro de Génesis, encontramos al patriarca de Mamre descansando a la sombra de las encinas durante la cálida tarde veraniega. Tres viajeros se acercan. No solicitan albergue ni favor alguno; pero Abraham no les permite seguir su viaje sin refrigerio. El patriarca es un anciano digno y rico, muy honrado, y acostumbrado a dar órdenes; sin embargo, al ver a los forasteros “salió corriendo de la puerta de su tienda a recibirlos, y se postró en tierra”. Dirigiéndose hacia el que encabezaba el grupo, dijo: “Señor, si ahora he hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases de tu siervo”. Génesis 18:2, 3. Él mismo trajo agua para que pudieran lavarse el polvo que había ensuciado sus pies durante el viaje; eligió la comida y dispuso su preparación. Mientras ellos descansaban a la fresca sombra, su esposa Sara preparó los alimentos y Abraham permaneció respetuosamente junto a ellos mientras disfrutaban de su hospitalidad. Les manifestó esta bondad simplemente como a viajeros comunes, como a forasteros a quienes tal vez no volvería a ver (Testimonios para la iglesia, t. 6, p. 343). Hay… muchos para quienes podemos hacer de nuestro hogar una bendición. Nuestras relaciones sociales no deberían ser dirigidas por los dictados de las costumbres del mundo, sino por el Espíritu de Cristo y por la enseñanza de su Palabra. En todas sus fiestas los israelitas admitían al pobre, al extranjero y al levita, el cual era a la vez asistente del sacerdote en el santuario y maestro de religión y misionero. A todos se les consideraba como huéspedes del pueblo, para compartir la hospitalidad en todas las festividades sociales y religiosas y ser atendidos con cariño en casos de enfermedad o penuria. A personas como ésas debemos dar buena acogida en nuestras casas. ¡Cuánto podría hacer semejante acogida para alegrar y alentar al enfermero misionero o al maestro, a la madre cargada de cuidados y de duro trabajo, o a las personas débiles y ancianas que viven tan a menudo sin familia, luchando con la pobreza y el desaliento!… El tiempo de que disponemos es corto. Solo una vez podemos pasar por este mundo; saquemos, pues, al hacerlo, el mejor provecho de nuestra vida. La tarea a la cual se nos llama no requiere riquezas, posición social ni gran capacidad. Lo que sí requiere es un espíritu bondadoso y abnegado y firmeza de propósito. Una luz, por pequeña que sea, si arde siempre, puede servir para encender otras muchas. Nuestra esfera de influencia, nuestras capacidades, oportunidades y adquisiciones podrán parecer limitadas; y sin embargo tenemos posibilidades maravillosas si aprovechamos fielmente las oportunidades que nos brindan nuestros hogares. Si tan solo queremos abrir nuestros corazones y nuestras casas a los divinos principios de la vida, llegaremos a ser canales por los que fluyan corrientes de fuerza vivificante (El ministerio de curación, pp. 272-274).

Entrada destacada

¡Maranata: El Senor Viene!

Nuestro estudio en los siglos futuros, 23 de diciembre Para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bonda...

Satanás les ofrece a los hombres los reinos del mundo si ellos le ceden la supremacía. Muchos hacen esto y sacrifican el cielo. Es mejor morir que pecar; es mejor padecer necesidad que defraudar; es mejor pasar hambre que mentir.—Testimonies for the Church 4:495 (1880). {EUD 121.4}
Pero el perdón tiene un significado más abarcante del que muchos suponen. Cuando Dios promete que “será amplio en perdonar”, añade, como si el alcance de esa promesa fuera más de lo que pudiéramos entender: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”.19 El perdón de Dios no es solamente un acto judicial por el cual libra de la condenación. No es sólo el perdón por el pecado. Es también una redención del pecado. Es la efusión del amor redentor que transforma el corazón. David tenía el verdadero concepto del perdón cuando oró “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”. También dijo: “Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”.20 {DMJ 97.2}
https://egwwritings.org/?ref=es_DMJ.97.2&para=175.533


“No cerrará el tiempo de gracia hasta que el mensaje haya sido proclamado con más claridad. La ley de Dios ha de ser magnificada [...] El mensaje de la justicia de Cristo ha de resonar de un extremo de la tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. Esta es la gloria de Dios que terminará la obra del tercer ángel”. Joyas de los Testimonios (JT), vol. 2, (Bs. As.: ACES, 1956), pp. 373,374