Ser Semejante a Jesús


El espíritu debe iluminar la palabra, 3 de abril https://ift.tt/31AVNDd Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido. 1 Corintios 2:12. Dios quiere que, aun en esta vida, la verdad se vaya desarrollando siempre ante su pueblo. Hay tan sólo una manera en que puede obtenerse este conocimiento. Podemos alcanzar a comprender la Palabra de Dios únicamente por medio de la iluminación de aquel Espíritu por el cual fue dada la Palabra. “Nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios”; “porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios”. Y la promesa del Salvador a quienes le siguen es: “Cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda verdad... porque tomará de lo mío, y os lo hará saber” 1 Corintios 2:11, 10; Juan 16:13, 14. Dios desea que los seres humanos ejerciten sus facultades de raciocinio; y el estudio de la Biblia fortalecerá y elevará el intelecto como ningún otro estudio puede hacerlo. Es el mejor ejercicio intelectual y espiritual para la mente humana. Sin embargo, no debemos endiosar la razón, que está sujeta a la debilidad y flaqueza de la humanidad. Si no queremos que las Escrituras queden veladas para nuestro entendimiento, de manera que no podamos comprender las más claras verdades, debemos tener la sencillez y fe de un niñito, y estar listos para aprender y solicitar la ayuda del Espíritu Santo. Un sentido del poder y la sabiduría de Dios, y de nuestra incapacidad para comprender su grandeza, debe inspirarnos humildad, y debemos abrir su Palabra con tanta reverencia como si entráramos en su presencia. Cuando acudimos a la Biblia, la razón debe reconocer una autoridad superior a ella, y el corazón y el intelecto deben inclinarse ante el gran YO SOY. Progresaremos en el verdadero conocimiento espiritual tan sólo en la medida en que comprendamos nuestra propia pequeñez y nuestra entera dependencia de Dios; pero todos los que acudan a la Biblia con un espíritu dispuesto a ser enseñados y a orar, para estudiar sus declaraciones como Palabra de Dios, recibirán iluminación divina. Hay muchas cosas, aparentemente difíciles u oscuras, que Dios hará claras y sencillas para quienes traten así de comprenderlas... Hay minas de la verdad que ha de descubrir todavía el investigador ferviente. Cristo representó la verdad por medio de un tesoro oculto en un campo. No está en la misma superficie; debemos cavar para encontrarla. Pero nuestro éxito en esto no depende tanto de nuestra capacidad intelectual como de nuestra humildad de corazón y de una fe que se vale de la ayuda divina.—Joyas de los Testimonios 2:306, 307.

Reflejemos a Jesús


El yo está oculto y Cristo es revelado, 3 de abril https://ift.tt/ng4MQ6a Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí. Gálatas 2:20. Cuando el cristiano se somete al solemne rito del bautismo, los tres poderes más altos del universo—el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo—dan su aprobación a ese acto, comprometiéndose a ejercer su poder en beneficio de él mientras él se esfuerza por honrar a Dios. Es sepultado, a semejanza de la muerte de Cristo, y es levantado a semejanza de su resurrección... Los tres grandes poderes del cielo se comprometen a proporcionar al cristiano toda la asistencia que requiera. El Espíritu cambia el corazón de piedra en un corazón de carne. Y al participar de la Palabra de Dios, los cristianos obtienen una experiencia que busca la semejanza divina. Cuando Cristo habita en el corazón por la fe, el cristiano es el templo de Dios. Cristo no habita en el corazón del pecador, sino en el corazón de quien es susceptible a las influencias del Cielo. El resplandor que procede del verdadero cristiano testifica de su unión con Cristo. El yo está oculto a la vista y Cristo es revelado. El Cielo reconoce el cumplimiento de la promesa... “Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es”. 1 Juan 3:2. Entonces aquellos cuyas vidas han estado ocultas en Cristo, quienes han peleado la buena batalla de la fe en esta tierra, resplandecerán con la gloria del Redentor en el reino de Dios. Hermano mío, hermana mía, el propósito de Dios para usted es que viva una vida que haga mejor a otros; una vida que mostrará que Cristo, la esperanza de gloria, está formado en el interior. Es su propósito que usted pueda decir con el apóstol Pablo: “Ya no vivo yo, más vive Cristo en mí”. Plenamente satisfecho, descansando en el amor de Cristo, en que el Redentor y Dador de la vida obrará por usted la salvación de su alma, usted sabrá a medida que se acerca más y aún más a El, lo que significa resistir la visión del que es Invisible. El contentamiento que Cristo concede es un don infinitamente más valioso que el oro y la plata y las piedras preciosas... Nuestras vidas son puras sólo cuando estamos bajo el control de Dios, y son felices sólo cuando mantenemos comunión con El. El esplendor que poseen quienes han ganado la más rica experiencia es sólo el reflejo de la luz del Sol de justicia. Quien vive más cerca de Jesús resplandecerá con mayor fulgor.—The Signs of the Times, 16 de agosto de 1905.

Recibiréis Poder


Instrumentos mediante los cuales el espíritu nos guía, 3 de abril https://ift.tt/gd1qK6P Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Juan 10:27. Jesús espera que todos los que profesan ser sus soldados le sirvan. Confía en que usted pueda reconocer al enemigo a fin de ofrecerle resistencia, y que no le dé confianza traicionando así el cometido sagrado. El Señor lo ha puesto en una posición donde puede ser elevado y ennoblecido, y estar constantemente adquiriendo idoneidad para su obra. Si no tiene estas calificaciones, solo usted tiene la culpa. Para guiarnos y hacernos capaces de orientar a otros, hay tres maneras por las cuales el Señor nos revela su voluntad. ¿Cómo podemos distinguir su voz de la de un extraño? ¿Cómo podemos discernir su voz de la de un falso pastor? Dios nos revela su voluntad en su Palabra, las Sagradas Escrituras. Su voz también se manifiesta en obras providenciales; y la reconoceremos al no separarnos de él para andar en nuestros caminos, haciendo según nuestra voluntad y siguiendo los impulsos de un corazón no santificado, hasta que los sentidos se hayan confundido de tal manera que no disciernan las cosas eternas, y la voz de Satanás esté de tal manera disfrazada que se la acepte como la voz de Dios. Otra manera de oír la voz de Dios es por medio de las súplicas del Espíritu Santo, el cual hace sobre el corazón impresiones que se manifestarán en el carácter. Si está usted en duda acerca de algún asunto, debe consultar primero las Escrituras. Si empezó de veras la vida de la fe, se ha entregado al Señor para ser completamente suyo, y él lo ha tomado para amoldarlo según su propósito, a fin de que sea vaso de honra. Debe tener un ferviente deseo de ser orientado para seguirlo donde quiera que lo conduzca. Entonces confíe en que él realizará sus designios, y al mismo tiempo coopere con él obrando su propia salvación con temor y temblor. Si por experiencia todavía no ha aprendido a conocer la voz del buen Pastor, podrá hallar dificultades que lo pondrán en situación de duda y peligro. Usted debiera poder distinguir su voz.—Testimonios Selectos 4:156, 157.

Nuestra Elevada Vocacion


“Aprended de mí”, 3 de abril https://ift.tt/qKre9fZ Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Mateo 11:29. “Aprended de mí—dijo el divino Maestro—, que soy manso y humilde de corazón”. ... Debemos aprender la abnegación, debemos aprender a tener ánimo, paciencia, fortaleza y amor perdonador. ... Si tenemos fe en Jesús como nuestro ayudador, y los ojos de nuestra fe están constantemente dirigidos hacia él, nos haremos semejantes a Jesús en carácter. El morará en nuestros corazones, y nosotros moraremos en Cristo. Cuando nuestras vidas están vestidas con la justicia de Cristo, se ocultan con él en Dios. El será nuestro consejero. Si le pedimos con fe, él iluminará nuestro entendimiento. ... Las lecciones que Cristo nos ha dado deben ser practicadas.—Manuscrito 21, 1889, pp. 4, 5. Cuando Cristo sea mantenido constantemente como el modelo delante del ojo de la mente, se formarán nuevos hábitos, se subyugarán y vencerán poderosas tendencias hereditarias y cultivadas. La estima propia será arrojada al polvo, los antiguos hábitos de pensamiento serán resistidos constantemente, el amor por la supremacía será visto tal como es, en su carácter despreciable, y será vencido.—Manuscrito 6, 1892. Cristo debe ser mezclado con todos nuestros pensamientos, nuestros sentimientos y nuestros afectos. Debe manifestarse en los menores detalles de nuestro servicio diario, en la obra que él nos ha dado para hacer. Cuando, en lugar de confiar en la comprensión humana, o conformarnos a las máximas del mundo, nos sentemos a los pies de Jesús, bebiendo ansiosamente sus palabras, aprendiendo de él, y diciendo: “Señor, ¿qué quieres que haga?”, nuestra independencia natural, nuestra confianza propia, nuestra obcecada fuerza de voluntad, serán cambiadas por un espíritu infantil, sumiso y educable. ... Reconoceremos la autoridad que tiene Cristo para dirigirnos, y su derecho a nuestra obediencia sin reparos.—Carta 186, 1902. Tendremos un concepto tan exaltado de Jesucristo, que el yo quedará aniquilado. Nuestros afectos se centrarán en Jesús, nuestros pensamientos serán poderosamente arrastrados hacia el cielo. Cristo crecerá, yo decreceré. ... Cultivaremos las virtudes que moran en Jesús, para que podamos reflejar ante los demás una representación de su carácter.—Manuscrito 21, 1889, pp. 5, 6.

La Maravillosa Gracia de Dios


Produce paz y da descanso, 3 de abril https://ift.tt/TcRtIqP Los impíos son como el mar en tempestad, que no puede estarse quieto... No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos. Isaías 57:20, 21. El pecado ha destruido nuestra paz. Mientras el yo no está subyugado, no podemos hallar descanso. Las pasiones predominantes en el corazón no pueden ser regidas por facultad humana alguna. Somos tan impotentes en esto como los discípulos para calmar la rugiente tempestad. Mateo 8:23-27. Pero el que calmó las olas de Galilea ha pronunciado la palabra que puede impartir paz a cada alma. Por fiera que sea la tempestad, los que claman a Jesús... hallarán liberación. Su gracia... calma las contiendas de las pasiones humanas, y en su amor el corazón descansa.—El Deseado de Todas las Gentes, 303. Para toda alma que lucha por elevarse de una vida de pecado a una vida de pureza, el gran elemento de fuerza reside en el único “nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”. Hechos 4:12... El único remedio contra el vicio es la gracia y el poder de Cristo.—El Ministerio de Curación, 134, 135. Debe mantenerse toda pasión profana bajo el control de la razón santificada por la gracia abundantemente otorgada por Dios. Estamos viviendo en una atmósfera de hechizos satánicos. El enemigo entretejerá un ensalmo de licencia alrededor de toda alma que no haya logrado parapetarse en la gracia de Cristo. Vendrán tentaciones; pero si velamos contra el enemigo, si mantenemos el equilibrio del dominio propio y la pureza, los espíritus seductores no tendrán influencia sobre nosotros. Los que nada hacen para estimular la tentación tendrán fuerza para resistirla cuando venga; pero los que se mantienen en una atmósfera de mal, ellos mismos tendrán la culpa si son vencidos y caen... Los hombres y las mujeres tienen que vigilarse; han de estar constantemente en guardia, no permitiéndose palabra o acto que podría ser causa de que se hablase mal de su conducta. El que profesa seguir a Cristo debe vigilarse, mantenerse puro y sin contaminación en sus pensamientos, palabras y actos. Su influencia sobre los demás debe ser elevadora. Su vida ha de reflejar los brillantes rayos del Sol de justicia... La eterna vigilancia es el precio de la seguridad.—Consejos para los Maestros Padres y Alumnos acerca de la Educación Cristiana, 197.

La Fe por la Cual Vivo


Un manantial de vida, 3 de abril https://ift.tt/AnY0cdv Mas el que bebiere del agua que yo le daré, para siempre no tendrá sed; mas el agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna. Juan 4:14. “El que trate de aplacar su sed en las fuentes de este mundo, beberá sólo para tener sed otra vez. Por todas partes, hay hombres que no están satisfechos. Anhelan algo que supla la necesidad del alma. Un solo Ser puede satisfacer esta necesidad. Lo que el mundo necesita, ‘el Deseado de todas las gentes,’ es Cristo. La gracia divina, que él sólo puede impartir, es como agua viva que purifica, refrigera y vigoriza el alma.... “El que prueba el amor de Cristo, lo deseará en mayor medida de continuo; pero no buscará otra cosa. Las riquezas, los honores y los placeres del mundo, no le atraen más. El constante clamor de su corazón es: ‘más de ti.’ Y el que revela al alma su necesidad, aguarda para satisfacer su hambre y sed. Todo recurso y cosa en que confíen los seres humanos, fracasarán. Las cisternas se vaciarán, los estanques se secarán; pero nuestro Redentor es el manantial inagotable. Podemos beber y volver a beber, y siempre hallar una provisión de agua fresca. Aquel en quien Cristo mora, tiene en sí la fuente de bendición, ‘una fuente de agua que salte para vida eterna.’ De este manantial puede sacar fuerza y gracia suficientes para todas sus necesidades.”—El Deseado de Todas las Gentes, 155. “El que bebe del agua viva, viene a ser una fuente de vida. El que recibe, viene a ser un dador. La gracia de Cristo en el alma, es como un manantial en el desierto, cuyas aguas surgen para refrescar a todos, y hace a los que están por perecer, ávidos de beber el agua de la vida.”—El Deseado de Todas las Gentes, 162.

Conflicto y Valor


Cara a cara, 3 de abril Éxodo 33:1-17. https://ift.tt/owaY2KA Y hablaba Jehová a Moisés cara a cara, como habla cualquiera a su compañero. Éxodo 33:11. Después de la transgresión de Israel, cuando éste se hizo el becerro de oro, Moisés volvió a interceder ante Dios en favor de su pueblo... Había aprendido por experiencia que a fin de tener influencia sobre el pueblo, debía tener primero poder con Dios. El Señor leyó la sinceridad y el propósito abnegado del corazón de su siervo, y condescendió en comunicarse con este débil mortal cara a cara, como un hombre habla con un amigo. Moisés se confió a Dios a sí mismo junto con todas sus cuitas, y abrió libremente su alma delante de él. El Señor no reprendió a su siervo sino que condescendió en escuchar sus súplicas... La respuesta que recibió fue: “Mi rostro irá contigo, y te haré descansar”. Pero Moisés no creía que podía conformarse con esto. Había ganado mucho, pero anhelaba acercarse más a Dios, y obtener mayor seguridad de su permanente presencia. Había llevado la carga de Israel; había soportado un peso abrumador de responsabilidad; cuando el pueblo pecaba, él sufría intenso remordimiento, como si él mismo fuese culpable; y ahora oprime su alma un sentimiento de los terribles resultados que se producirán si Dios abandona a los hijos de Israel a la dureza e impenitencia de su corazón... Moisés insiste en su petición con tanto fervor y sinceridad, que le llega la respuesta: “También haré esto que has dicho, por cuanto has hallado gracia en mis ojos, y te he conocido por tu nombre”. Al llegar a este punto esperaríamos que el profeta dejaría de interceder; pero no, envalentonado por su éxito, se atreve a acercarse más a Dios, con una santa familiaridad que supera casi nuestra comprensión. Hace luego una petición que ningún ser humano hizo antes: “Ruégote que me muestres tu gloria”. ¡Qué petición de parte de un ser mortal finito! Pero, ¿es rechazado? ¿Le reprende Dios por su pretensión? No; oímos las misericordiosas palabras: “Yo haré pasar todo mi bien delante de tu rostro”... En la historia de Moisés podemos ver cuán íntima comunión con Dios puede gozar el hombre. Testimonios Selectos 3:383-385.

Cada Día con Dios


El triunfo de la verdad, 3 de abril https://ift.tt/rZY0ybU Presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad, palabra sana e irreprochable. Tito 2:7, 8. El triunfo de la verdad depende de la influencia de los que creen en ella. Mediante la labor personal, una vida bien ordenada, piedad, fe y tierna compasión, promovemos la verdad. Tenemos un cielo que ganar. La mayor recompensa se le ofrece al vencedor. Sí, se nos presenta un eterno peso de gloria para inducirnos a correr de tal manera que obtengamos la inmarcesible corona de la vida. El que está decidido a vencer tiene una lucha sin cuartel ante sí. Debe combatir virilmente la buena batalla de la fe. Tiene que esforzarse correctamente cada día en procura de pureza y excelencia moral. Eso lo requiere Dios para que pueda representar a Cristo. Debe creer en las promesas de Dios y confiar en Cristo, para que los que lo rodean vean que dispone de un tesoro inagotable. Sus palabras deben ser correctas; su espíritu recto. Sus manos jamás deben debilitarse al hacer la obra que Dios le ha confiado. Encontrará dificultades, pero siempre debe ser valiente y alegre. Debe tratar a todos como adquiridos por la sangre de Cristo, sin parcialidad ni hipocresía. El Espíritu Santo es su ayudador. Por medio de Cristo, que lo fortalece, lo puede soportar todo. Los talentos que Dios ha confiado requieren un rendimiento proporcional. Dios acepta “según lo que uno tiene, no según lo que no tiene”. 2 Corintios 8:12. No espera del hombre que tiene un solo talento lo que espera del que tiene cinco. Si los ricos quieren satisfacer todos sus deseos y gozar de las cosas buenas de esta vida, serán juzgados como corresponde. No quieren honrar a Cristo obedeciéndole humildemente y llevando la cruz. Viven para complacerse a sí mismos y así deshonran a Dios; él declara: “Honraré a los que me honran”. 1 Samuel 2:30... Solamente los que usan fielmente sus talentos, con un solemne sentido de responsabilidad, hacen una gran obra, debido a su constante fidelidad... Solamente los que lo glorifiquen al aumentar sabiamente los talentos que les ha confiado para ayudar a la causa de Dios, son grandes para él.—Manuscrito 53, del 3 de abril de 1899, “Palabras de instrucción para los que están relacionados con el sanatorio”.

Alza tus Ojos


Busquen consejo divino, no humano, 3 de abril https://ift.tt/yFtwINU Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Santiago 1:5. Son tantos los que, cuando están en problemas... se olvidan de las invitaciones que Dios extiende abundantemente y comienzan a buscar y tratar de conseguir ayuda humana. Acuden a seres humanos en busca de ayuda, y es así como sus experiencias se vuelven débiles y confusas. Se nos indica que en todas nuestras tribulaciones busquemos al Señor más fervorosamente, recordando que somos su propiedad, sus hijos por adopción. Ningún ser humano puede entender nuestras necesidades como Cristo. Recibiremos ayuda si se la pedimos con fe. Somos suyos por creación y por redención. Mediante las cuerdas del amor divino estamos ligados a la fuente de todo poder y fortaleza. Si solamente dependemos de Dios, pidiéndole lo que necesitamos como un niñito pide a su padre lo que necesita, obtendremos una rica experiencia. Aprenderemos que Dios es la fuente de toda fortaleza y poder... Cuando el pueblo depende de los seres humanos, Dios es deshonrado grandemente. El no nos dijo que hagamos esto. Nos dijo que El nos enseñará, que El nos guiará. Podemos acudir a El y recibir ayuda... ¿Qué fue lo que Cristo prometió a sus discípulos si creían en El como su salvador personal? “He aquí yo estoy con vosotros todos los días”, les dijo, “hasta el fin del mundo”. Mateo 28:20. Y otra vez les dijo, “estoy a tu diestra para ayudarte”. Véase Salmos 16:8. Piensen en las muchas promesas que nos ha dado, de las que podemos aferrarnos mediante la mano de la fe. Cuando acudimos a la fuente de poder sabemos que recibiremos esa inteligencia y sabiduría que proceden de una fuente pura, que no está mezclada con ningún elemento de origen humano. Cuando oramos, es nuestro privilegio saber que Dios quiere que oremos, que le pidamos ayuda. “Pedid, y se os dará”. Mateo 7:7. Está en ustedes creer que recibirán. Dios desea que nos familiaricemos con El. que hablemos con El. que le contemos nuestras dificultades y que conozcamos por experiencia propia lo que significa pedir a Alguien que nunca se equivoca en sus evaluaciones ni comete un solo error... Deshonramos a Dios cuando nos esforzamos por encontrar a alguien que pensamos que puede entender nuestro caso y ayudarnos. ¿No nos ha dado El a su Hijo unigénito? ¿Acaso no está Cristo junto a nosotros para darnos la ayuda que necesitamos?... No somos corteses con Cristo. No reconocemos su presencia. No percibimos que debe ser nuestro huésped de honor, que nos rodea con su largo brazo humano, mientras que con su brazo divino se aferra del trono del Infinito Olvidamos que el umbral del cielo está inundado con la gloria que procede del trono de Dios, y que la luz puede caer directamente sobre quienes están buscando la ayuda que solamente Cristo puede dar.—Manuscrito 144, del 3 de abril de 1901, “Una reunión matutina”.

En los Lugares Celestiales


Especial cuidado por los débiles, 3 de abril https://ift.tt/tUgoaGH Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos. Mateo 18:10. El hombre es propiedad de Dios, y los ángeles están mirando con concentrado interés para ver cómo trata el hombre a sus semejantes. Cuando las inteligencias celestiales ven a aquellos que pretenden ser hijos e hijas de Dios haciendo esfuerzos cristianos para ayudar a los errantes, manifestando un espíritu tierno y compasivo por los que están arrepentidos y caídos, los ángeles se acercan aún más a ellos y les recuerdan las palabras que aliviarán y elevarán el alma. No debemos menospreciar el menor de los pequeños de Dios... Jesús ha dado su vida preciosa, su atención personal al menor de los pequeñitos de Dios, y los ángeles poderosos en fortaleza acampan alrededor de los que temen a Dios. Estemos pues en guardia y no permitamos nunca que ningún pensamiento despectivo ocupe nuestra mente respecto a uno de los pequeños de Dios. Deberíamos cuidar al errante con solicitud y hablar palabras de ánimo al caído, y temamos no sea que por alguna acción imprudente los apartemos del misericordioso Salvador... Todo el cielo está interesado en la obra de salvar a los perdidos. Los ángeles velan con sumo interés para ver quién dejará a las noventa y nueve y saldrá en la tempestad, la tormenta y la lluvia al árido desierto para buscar la oveja perdida. Los perdidos están todos a nuestro alrededor, pereciendo y tristemente abandonados. Pero son de valor ante Dios, la compra de la sangre de Cristo.—The Review and Herald, 30 de junio de 1896. Los ángeles siempre están presentes donde más se los necesita, con los que tienen que pelear las batallas más duras contra el yo y que se encuentran en las circunstancias más desagradables.—The Youth’s Instructor, 12 de junio de 1902.

A Fin de Conocerle


Igualdad de los creyentes en Cristo, 3 de abril https://ift.tt/jiTSDVX Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Gálatas 3:26-28. El secreto de la unidad se halla en la igualdad de los creyentes en Cristo. La razón de toda división, discordia y diferencia se encuentra en la separación de Cristo... Dios no hace acepción de personas. Jesús conocía la vanidad de la pompa humana y no prestó atención a su despliegue. En su dignidad de alma, su elevación de carácter, su nobleza de principio, estuvo muy por encima de las vanas modas del mundo... Los mejores círculos de la sociedad humana lo hubieran cortejado, si hubiera consentido en aceptar sus favores, pero no deseó el aplauso de los hombres... La riqueza, la posición, el rango mundanal en todas sus variedades y distinciones de la grandeza humana, no significaban sino otros tantos grados de pequeñez para Aquel que había dejado el honor y la gloria del cielo y que no poseía esplendor terrenal, no se complacía en el lujo, y no exhibía adornos, sino humildad. Los humildes, los que estaban oprimidos por la pobreza y los cuidados, abrumados de trabajo penoso, no podían encontrar en la vida y ejemplo de Cristo lo que los indujera a pensar que Jesús no estaba familiarizado con sus pruebas, que no conocía la presión de sus circunstancias y que no podía simpatizar con ellos en su necesidad y dolor. La modestia de su humilde vida diaria estaba en armonía con su humilde nacimiento y sus circunstancias. El Hijo del Dios infinito, el Señor de la vida y de la gloria, descendió humildemente hasta la vida del más humilde para que nadie se sintiera excluido de su presencia. Se colocó al alcance de todos. No eligió a unos pocos favoritos para asociarse con ellos e ignorar a todos los otros.—The Review and Herald, 22 de diciembre de 1891.

¡Maranata: El Senor Viene!


Motivados por el amor, 3 de abril https://ift.tt/RgaUwnv Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano. 1 Juan 4:21. El amor es la base de la piedad. Cualquiera que sea la profesión que se haga, nadie tiene amor puro para con Dios a menos que tenga amor abnegado para con su hermano... Cuando el yo está sumergido en Cristo, el amor brota espontáneamente. La plenitud del carácter cristiano se alcanza cuando el impulso a ayudar y beneficiar a otros brota constantemente de adentro, cuando la luz del cielo llena el corazón y se revela en el semblante... Relacionados con Cristo, estamos relacionados con nuestros semejantes por los áureos eslabones de la cadena del amor. Entonces la piedad y la compasión de Cristo se manifestarán en nuestra vida. No esperaremos que se nos traigan los menesterosos e infortunados. No necesitaremos que se nos suplique para sentir las desgracias ajenas. Será para nosotros tan natural ministrar a los menesterosos y dolientes como lo fue para Cristo andar haciendo bienes... La gloria del cielo consiste en elevar a los caídos, consolar a los angustiados... Dios no reconoce ninguna distinción por causa de la nacionalidad, la raza o la casta. Es el Hacedor de toda la humanidad. Todos los hombres son una familia por la creación, y todos son uno por la redención Cristo vino para demoler todo muro de separación, para abrir todo departamento del templo, para que cada alma pudiese tener libre acceso a Dios. Su amor es tan amplio, tan profundo, tan completo, que penetra por doquiera. Libra de la influencia de Satanás a las pobres almas que han sido seducidas por sus engaños. Las coloca al alcance del trono de Dios, el trono circuido por el arco de la promesa... Cristo está tratando de elevar a todos aquellos que quieran ser elevados a un compañerismo consigo, para que podamos ser uno con él, como él es uno con el Padre. Nos permite llegar a relacionarnos con el sufrimiento y la calamidad a fin de sacarnos de nuestro egoísmo; trata de desarrollar en nosotros los atributos de su carácter: la compasión, la ternura y el amor... “Si guardares mi ordenanza—declara el Señor—, entre éstos que aquí están te daré lugar” (Zacarías 3:7), aun entre los ángeles que rodean su trono. Cooperando con los seres celestiales en su obra en la tierra, nos estamos preparando para su compañía en el cielo.11Palabras de Vida del Gran Maestro, 316-321.

Entrada destacada

¡Maranata: El Senor Viene!

Nuestro estudio en los siglos futuros, 23 de diciembre Para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bonda...

Satanás les ofrece a los hombres los reinos del mundo si ellos le ceden la supremacía. Muchos hacen esto y sacrifican el cielo. Es mejor morir que pecar; es mejor padecer necesidad que defraudar; es mejor pasar hambre que mentir.—Testimonies for the Church 4:495 (1880). {EUD 121.4}
Pero el perdón tiene un significado más abarcante del que muchos suponen. Cuando Dios promete que “será amplio en perdonar”, añade, como si el alcance de esa promesa fuera más de lo que pudiéramos entender: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”.19 El perdón de Dios no es solamente un acto judicial por el cual libra de la condenación. No es sólo el perdón por el pecado. Es también una redención del pecado. Es la efusión del amor redentor que transforma el corazón. David tenía el verdadero concepto del perdón cuando oró “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”. También dijo: “Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”.20 {DMJ 97.2}
https://egwwritings.org/?ref=es_DMJ.97.2&para=175.533


“No cerrará el tiempo de gracia hasta que el mensaje haya sido proclamado con más claridad. La ley de Dios ha de ser magnificada [...] El mensaje de la justicia de Cristo ha de resonar de un extremo de la tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. Esta es la gloria de Dios que terminará la obra del tercer ángel”. Joyas de los Testimonios (JT), vol. 2, (Bs. As.: ACES, 1956), pp. 373,374