Sabbath School


Sabbath School
Identifiquemos a la bestia: Segunda parte https://ift.tt/dhnYRof Comentarios Elena G.W para las Lecciones de Escuela Sabática @seguidores @destacar El apóstol Pablo advirtió a la iglesia que no debía esperar la venida de Cristo en tiempo de él. “Ese día —dijo— no puede venir, sin que” haya venido “primero la apostasía”, y sin que haya sido “revelado el hombre de pecado”. 2 Tesalonicenses 2:3. Únicamente después que se haya producido la gran apostasía y se haya cumplido el largo período del reino del “hombre de pecado”, podemos esperar el advenimiento de nuestro Señor. El “hombre de pecado”, que también es llamado “misterio de iniquidad”, “hijo de perdición” y “el inicuo”, representa al papado, el cual, como está predicho en las profecías, conservaría su supremacía durante 1,260 años. Este período terminó en 1798. La venida del Señor no podía verificarse antes de dicha fecha. San Pablo abarca con su aviso toda la dispensación cristiana hasta el año 1798. Solo después de esta fecha debía ser proclamado el mensaje de la segunda venida de Cristo (El conflicto de los siglos, p. 356). Satanás, como poderoso general, ha copado el campo; y en la última parte del tiempo que le queda está trabajando con todo método concebible para cerrar la puerta a la luz que Dios quiere que venga a su pueblo. Él recorre todo el mundo para fortalecer sus filas, y los pocos que son fieles a los requerimientos de Dios son los únicos que podrán resistir, y aun a ellos los está tratando de vencer… Acudid a Dios por vosotros mismos; orad por iluminación divina, para estar seguros de que realmente conocéis la verdad, a fin de que cuando se despliegue el poder portentoso y obrador de milagros, y el enemigo venga como ángel de luz, distingáis entre la obra genuina de Dios y la obra de imitación de los poderes de las tinieblas… Hay que amonestar al mundo, y cuando el mensaje del tercer ángel resuene en alta voz, las almas estarán plenamente preparadas para hacer decisiones a favor o en contra de la verdad (Mensajes selectos, t. 3, pp. 444, 445). La Biblia declara que antes de la venida del Señor habrá un estado de decadencia religiosa análoga a la de los primeros siglos. “En los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque los hombres serán amadores de sí mismos, amadores del dinero, jactanciosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a sus padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, incontinentes, fieros, aborrecedores de los que son buenos, traidores, protervos, hinchados de orgullo, amadores de los placeres, más bien que amadores de Dios; teniendo la forma de la piedad, mas negando el poder de ella”. 2 Timoteo 3:1-5… Satanás obrará “con todo poder, y con señales, y con maravillas mentirosas, y con todo el artificio de la injusticia”. Y todos los que “no admitieron el amor de la verdad, para que fuesen salvos”, serán dejados para que acepten “operación de error, a fin de que crean a la mentira”. 2 Tesalonicenses 2:9-11. Cuando se haya llegado a este estado de impiedad, se verán los mismos resultados que en los primeros siglos (El conflicto de los siglos, pp. 438, 439).
¡Visita Sabbath School!

Entrada destacada

¡Maranata: El Senor Viene!

Nuestro estudio en los siglos futuros, 23 de diciembre Para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bonda...

Satanás les ofrece a los hombres los reinos del mundo si ellos le ceden la supremacía. Muchos hacen esto y sacrifican el cielo. Es mejor morir que pecar; es mejor padecer necesidad que defraudar; es mejor pasar hambre que mentir.—Testimonies for the Church 4:495 (1880). {EUD 121.4}
Pero el perdón tiene un significado más abarcante del que muchos suponen. Cuando Dios promete que “será amplio en perdonar”, añade, como si el alcance de esa promesa fuera más de lo que pudiéramos entender: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”.19 El perdón de Dios no es solamente un acto judicial por el cual libra de la condenación. No es sólo el perdón por el pecado. Es también una redención del pecado. Es la efusión del amor redentor que transforma el corazón. David tenía el verdadero concepto del perdón cuando oró “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”. También dijo: “Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”.20 {DMJ 97.2}
https://egwwritings.org/?ref=es_DMJ.97.2&para=175.533


“No cerrará el tiempo de gracia hasta que el mensaje haya sido proclamado con más claridad. La ley de Dios ha de ser magnificada [...] El mensaje de la justicia de Cristo ha de resonar de un extremo de la tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. Esta es la gloria de Dios que terminará la obra del tercer ángel”. Joyas de los Testimonios (JT), vol. 2, (Bs. As.: ACES, 1956), pp. 373,374