Lo más importante de la vida


Lo más importante de la vida, 4 de marzo

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33. MSV76 69.1
Este es el primer gran propósito: El reino de los cielos, la justicia de Cristo. Todos los otros propósitos que debemos alcanzar deben ocupar un lugar secundario. MSV76 69.2
Satanás presentará como difícil la senda de la santidad, mientras los senderos del placer mundanal están tapizados de flores. El tentador desplegará el mundo con sus placeres delante de vosotros, con colores falsos y lisonjeros. La vanidad es uno de los rasgos más fuertes de nuestra naturaleza depravada, y él sabe que puede recurrir a ella con éxito. Os va a adular por medio de sus instrumentos. Recibiréis alabanza que agradará vuestra vanidad y fomentará vuestro orgullo y estima propia, para que penséis que con semejantes ventajas y atractivos es realmente una gran lástima que salgáis del mundo y os separéis de él para convertiros en cristianos... Pero considerad que los placeres de la tierra terminarán, y que también cosecharéis lo que sembráis. ¿Son vuestros atractivos personales, vuestra habilidad o vuestros talentos, demasiado valiosos para dedicarlos a Dios, el Autor de vuestro ser, el que os cuida a cada momento? ¿Son vuestras cualidades demasiado preciosas para consagrarlas al Señor? MSV76 69.3
Los jóvenes insisten en que necesitan algo para avivar y divertir la mente. Descubrí que hay placer en la actividad productiva, que hay satisfacción en una vida dedicada a la utilidad. Pero hay quienes insisten todavía en que deben tener algo... hacia lo cual pueda volverse la mente en busca de alivio y refrigerio, en medio de los cuidados y la fatigosa labor. Lo que se necesita precisamente es la esperanza cristiana. La religión demostrará al creyente que es consoladora, una guía segura hacia la Fuente de la verdadera felicidad. Los jóvenes debieran estudiar la Palabra de Dios y dedicarse a la meditación y la oración, y descubrirán que no pueden emplear de mejor manera sus momentos libres. MSV76 69.4
Jóvenes amigos, debéis dedicar tiempo a probaros a vosotros mismos, a ver si permanecéis en el amor de Dios. Sed diligentes, para aseguraros de vuestra vocación y elección.6Testimonies for the Church 1:502, 503. MSV76 69.5
Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia. Haced de esto lo primero y lo último.7Fundamentals of Christian Education, 484. MSV76 69.6

Trabajar fielmente, usando sabiamente el tiempo


Trabajar fielmente, usando sabiamente el tiempo, 4 de marzo

Me es necesario hacer las obras del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie puede trabajar. Juan 9:4. SSJ 70.1
Cristo les ha dado a todos los seres humanos su obra, y debemos reconocer la sabiduría de su plan para nosotros mediante una cordial cooperación con él. La verdadera felicidad sólo se encuentra en una vida de servicio. El que vive una vida inútil y egoísta, es desgraciado. Está insatisfecho consigo mismo y con todos los demás. SSJ 70.2
Obreros fieles, consagrados, usarán gustosamente sus dones más elevados en el servicio más humilde. Se dan cuenta de que el verdadero servicio significa ver y ejecutar los deberes que el Señor señala. SSJ 70.3
Hay muchos que no están satisfechos con la obra que el Señor les ha dado. No están satisfechos con servirlo alegremente en el lugar que les ha señalado, y realizar sin quejarse la obra que ha puesto en sus manos. SSJ 70.4
Es correcto que no estemos conformes con la forma en que cumplimos nuestros deberes, pero no debiéramos estar insatisfechos con el deber mismo sencillamente porque nos gustaría más bien hacer alguna otra cosa. En su providencia Dios pone ante los seres humanos un servicio que es como una medicina para su mente enferma. De esa forma trata de dirigirlos para que pongan a un lado las preferencias egoístas, las cuales, si se albergan, los descalificarían para la obra que tiene para ellos. Si aceptan y realizan este servicio, su mente será sanada. Pero si rehúsan hacerlo, tendrán conflictos con ellos mismos y con otros. SSJ 70.5
El Señor disciplina a sus obreros para que puedan estar preparados para ocupar los lugares señalados para ellos. Desea amoldar su mente de acuerdo con su voluntad. Para este propósito los hace pasar por pruebas y tribulaciones. Coloca a algunos en lugares donde una disciplina relajada y el exceso de tolerancia no llegarán a ser una trampa para ellos, donde se les enseñará a apreciar el valor del tiempo y a hacer el mejor uso de él.—Manuscript Releases, 422, 423. SSJ 70.6

La sangre de Cristo fue derramada para perdonar nuestros pecados


La sangre de Cristo fue derramada para perdonar nuestros pecados, 4 de marzo

Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús. Romanos 3:23, 24. RJ 69.1
Necesitamos a Jesús cada momento. Permitir que su amor se escape de nuestros corazones significa mucho. Por esto El mismo dice: “Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor”. Apocalipsis 2:4. RJ 69.2
La religión de muchos es como un témpano, heladamente fría. Los corazones de no pocos están todavía sin ablandarse, sin someterse. No pueden afectar a los corazones de los demás porque sus propios corazones no están cargados con el bendito amor que fluye del corazón de Cristo... RJ 69.3
La religión genuina se basa en una creencia en las Escrituras. Ha de creerse la Palabra de Dios sin albergar dudas. Ninguna parte de ella ha de ser eliminada o modificada para ajustarse a ciertas teorías. Los hombres no han de exaltar la sabiduría humana al enjuiciar la Palabra de Dios. La Biblia fue escrita por hombres santos de la antigüedad inspirados por el Espíritu Santo; y este Libro contiene todo lo que sabemos con seguridad acerca de Dios y de Cristo, y todo lo que podemos esperar saber, a menos que como Pablo, seamos transportados al tercer cielo... Esta revelación no corrompió la humildad del apóstol. RJ 69.4
La vida del cristiano es regulada por la Palabra de Dios tal como está escrita. Todas las verdades del Antiguo y del Nuevo Testamentos forman un todo completo. Hemos de acariciar, creer y obedecer estas verdades. Para el verdadero discípulo, la fe en Dios es un principio vivo y activo; “porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación”. Romanos 10:10. Por la fe el hombre cree que recibe la justicia de Cristo. RJ 69.5
La fe, en sí misma, es un acto de la mente. Jesús mismo es el autor y consumador de nuestra fe. El dio su vida por nosotros, y su sangre habla en nuestro favor cosas mejores que las que habló la sangre de Abel, que clamaba a Dios contra Caín, el homicida. La sangre de Cristo fue derramada para perdonar nuestros pecados. RJ 69.6
Muchos cometen el error de tratar de definir con precisión las sutiles distinciones entre justificación y santificación. A menudo introducen en estas definiciones sus propias ideas y especulaciones. ¿Por qué tratar de ser más minuciosos que la Inspiración en el tema vital de la justificación por la fe?—Manuscrito 21, de 1891. RJ 69.7
Los que están unidos a Cristo mediante el ejercicio diario, a cada hora, de la fe que obra por amor y purifica el alma, reciben el perdón de sus pecados, y son santificados para vida eterna.—Manuscrito 12a, de 1901. RJ 69.8

Gozo


Gozo, 4 de marzo

Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; contaré todas tus maravillas. Me alegraré y me regocijaré en ti. Cantaré a tu nombre, oh Altísimo. Salmos 9:1, 2. RP 74.1
Nosotros debemos tener más fe. Creamos en la salvación. Vayamos a Dios y rindámonos a él con fe, y él nos dará un carácter como el de Cristo. Esto debemos repetirlo a todos una y otra vez. Al estar unidos a Cristo podemos darlo a conocer al mundo. Entonces cesarán todas nuestras vacilaciones y obras hechas por casualidad. RP 74.2
Honramos a Dios mostrando una fe firme y una recta confianza. Recordemos que el Señor no es glorificado por la exteriorización de un espíritu displicente e infeliz. Si Dios cuida de las flores y les da perfume y hermosura, ¿cuánto más nos dará la fragancia de un carácter alegre? ¿Será que no quiere o no puede restaurar en nosotros la imagen divina? Tengamos fe en él. Ahora mismo pongámonos en una situación en la que podamos recibir el Espíritu que él nos ofrece. De este modo podremos dar a conocer al mundo lo que hace la verdadera religión en favor del hombre y de la mujer. El gozo de la salvación llenará los corazones, y la paz y la confianza nos hará decir: “Yo sé que mi Redentor vive”. Job 19:25. RP 74.3
El Señor ha manifestado con claridad en su Palabra que su pueblo es gente gozosa. La verdadera fe levanta las manos y las pone sobre Uno que está detrás de las promesas: “Y se multiplicará la paz de tus hijos”. Isaías 54:13. “He aquí que yo extiendo sobre ella paz como un río”. Isaías 66:12. “He aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo”. Isaías 65:18. En Dios podemos alegrarnos “con gozo inefable y glorioso”. 1 Pedro 1:8. “Benditas serán en él todas las naciones. Lo llamarán bienaventurado”. Salmos 72:17. Esforcémonos para educar a los creyentes a regocijarse en el Señor. El gozo espiritual es resultado de una fe activa. El pueblo de Dios ha de estar lleno de fe y del Espíritu Santo. Entonces podrá ser glorificado en ellos.—Bible Training School, 1 de abril de 1905. RP 74.4

“Y en la ciencia templanza”


“Y en la ciencia templanza”, 4 de marzo

Y en la ciencia templanza, y en la templanza paciencia; y en la paciencia temor de Dios. 2 Pedro 1:6. NEV 71.1
Al conocimiento se le debe añadir temperancia. “¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, mas uno lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis. Y todo aquel que lucha, de todo se abstiene: y ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible; mas nosotros, incorruptible. Así que, yo de esta manera corro, no como cosa incierta; de esta manera peleo, no como quien hiere el aire: antes hiero mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre”. 1 Corintios 9:24-27. NEV 71.2
Los atletas cumplen gozosamente las condiciones necesarias para ser entrenados, para lograr el máximo de su fortaleza física. No complacen el apetito, sino que se someten a constantes restricciones, y se abstienen de los alimentos que los debilitarían o disminuirían la plena capacidad de cualquiera de sus órganos. Sin embargo ellos pelean “como quien hiere el aire”, mientras los cristianos están en una prueba real. Los competidores de los juegos buscan meramente laureles que perecen. Los cristianos tienen delante de ellos una gloriosa corona de inmortalidad, e incorruptible. Y en esta carrera celestial hay lugar para que todos ganen el premio. Nadie fracasará si corre bien, si obra en conformidad con la luz que brilla sobre él, ejerciendo sus capacidades que, según el mejor conocimiento que tiene, ha mantenido en condiciones saludables ... NEV 71.3
Cualquier hábito o práctica que debilite los nervios o las facultades del cerebro o la fuerza física, descalifica para el ejercicio de la gracia que viene después de la temperancia: la paciencia. ... NEV 71.4
Un hombre que es intemperante, que usa estimulantes—cerveza, vino, bebidas fuertes, té y café, opio, tabaco o cualquiera de esas sustancias que son perniciosas para la salud—no puede ser un hombre paciente. De manera que la temperancia es un peldaño de la escalera, sobre el cual deberemos afirmar nuestros pies antes de añadir la gracia de la paciencia. En el alimento, en el vestido, en el trabajo, en las horas de descanso, en el ejercicio sano, debemos ser regulados por el conocimiento que es nuestro deber obtener, para que podamos, a través del esfuerzo ferviente, colocarnos en la debida relación con la vida y la salud.—Manuscrito 13, 1884, pp. 4-6.

En el lugar santísimo


En el lugar santísimo, 4 de marzo

Jehová está en su santo templo; calle delante de él toda la tierra. Habacuc 2:20. MGD 71.1
Vi un trono, y sobre él se sentaban el Padre y el Hijo. Me fijé en el rostro de Jesús y admiré su hermosa persona. No pude contemplar la persona del Padre, pues le cubría una nube de gloriosa luz. Pregunté a Jesús si su Padre tenía forma como él. Dijo que la tenía, pero que yo no podía contemplarla, porque, dijo: “Si llegases a contemplar la gloria de su persona, dejarías de existir”... MGD 71.2
Vi al Padre levantarse del trono, y en un carro de llamas entró en el lugar santísimo, al interior del velo, y se sentó... Después de eso, un carro de nubes, cuyas ruedas eran como llamas de fuego, llegó rodeado de ángeles, adonde estaba Jesús. El entró en el carro y fue llevado al lugar santísimo, donde el Padre estaba sentado. Allí contemplé a Jesús, el gran Sumo Sacerdote, de pie delante del Padre.—Primeros Escritos, 54, 55. MGD 71.3
Dos hermosos querubines estaban de pie en cada extremo del arca con las alas desplegadas sobre ella, y tocándose una a otra por encima de la cabeza de Jesús, de pie ante el propiciatorio. Estaban los querubines cara a cara, pero mirando hacia el arca, en representación de toda la hueste angélica que contemplaba con interés la ley de Dios. Entre los querubines había un incensario de oro, y cuando las oraciones de los santos, ofrecidas con fe, subían a Jesús y él las presentaba a su Padre, una nube fragante subía del incienso a manera de humo de bellísimos colores. Encima del sitio donde estaba Jesús ante el arca, había una brillantísima gloria que no pude mirar. Parecía el trono de Dios.—Ibid. 251, 252. MGD 71.4
Nuestro crucificado Señor implora por nosotros en presencia del Padre ante el trono de la gracia. Podemos invocar su sacrificio expiatorio para nuestro perdón, justificación y santificación. El Cordero inmolado es nuestra única esperanza. Nuestra fe lo contempla, se aferra de él como del único que puede salvar hasta lo sumo, y la fragancia de la ofrenda omnisuficiente es aceptada por el Padre. La gloria de Cristo está implícita en nuestro buen éxito. Tiene un interés común por toda la humanidad. Es nuestro simpatizante Salvador.—The S.D.A. Bible Commentary 7:948. MGD 71.5

El orgullo precede a la caída


El orgullo precede a la caída, 3 de marzo

Antes del quebrantamiento es la soberbia; y antes de la caída la altivez de espíritu. Proverbios 16:18. FV 70.1
“Satanás cayó porque ambicionó ser igual a Dios. Deseaba participar en los consejos y propósitos divinos, de los cuales estaba excluido, porque, como ser creado, era incapaz de comprender la sabiduría del Infinito. fue este orgullo ambicioso el que lo indujo a la rebelión, y por este mismo medio trata de causar la ruina del hombre.”—Testimonies for the Church 5:702. FV 70.2
“El pecado tuvo su origen en el egoísmo. Lucifer, el querubín protector, deseó ser el primero en el cielo. Trató de dominar a los seres celestiales, apartándolos de su Creador, y granjearse para sí su homenaje. Para ello, representó falsamente a Dios, atribuyéndole el deseo de ensalzarse. Trató de investir al amante Creador con sus propias malas características.”—El Deseado de Todas las Gentes, 17. FV 70.3
“Cuando quiera que se entreguen al orgullo y la ambición, su vida se mancilla; porque el orgulloso, ni sintiendo necesidad alguna, cierra su corazón a las bendiciones infinitas del cielo.”—La Historia de Profetas y Reyes, 43. FV 70.4
“Si Lucifer hubiese deseado realmente ser como el Altísimo, nunca habría abandonado el puesto que le había sido señalado en el cielo; porque el espíritu del Altísimo se manifiesta en un ministerio abnegado. Lucifer deseaba el poder de Dios, pero no su carácter. Buscaba para sí el lugar más alto, y todo ser impulsado por su espíritu hará lo mismo.”—El Deseado de Todas las Gentes, 384. FV 70.5
“El orgullo es un temible rasgo de carácter. ‘Antes del quebrantamiento es la soberbia.’ Esto es verdad en la familia, en la iglesia y en la nación.”—Testimonies for the Church 4:377. FV 70.6

El maestro enviado del cielo


El maestro enviado del cielo, 4 de marzo

Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás. Juan 6:35. HHD 72.1
La mente es la mejor posesión que tenemos; pero debe estar preparada por el estudio, la reflexión y el aprendizaje en la escuela de Cristo, el mejor y más auténtico Educador que el mundo haya conocido jamás.—The Review and Herald, 6 de enero de 1885. HHD 72.2
“Yo soy el pan de vida”, el Autor, el Alimentador y el Sustentador de la vida eterna, espiritual... Cristo se presentó a sí mismo bajo el símil del pan celestial. Comer su carne y beber su sangre significa recibirlo como un Maestro enviado por el cielo. Creeren él es esencial para la vida espiritual. Los que participan del banquete de la Palabra nunca sienten hambre, nunca padecen de sed, nunca desean ningún bien más elevado ni más exaltado.—Manuscrito 81, 1908. HHD 72.3
El conocimiento más sublime y verdadero se encuentra en la Palabra de Dios. Hay elocuencia en su sencillez. Hay quienes se aferrarán a las palabras de los supuestos grandes hombres del mundo, y querrán espaciarse en su fraseología como algo que necesitan estimar y avaluar. Oiréis a hombres exaltando a seres humanos, ensalzando a aquellos a quienes el mundo llama grandes. Al hacerlo, pierden de vista a Cristo en la Palabra. Para ellos no es el todo de todos; no es el primero, el último y el mejor en todo. Los tales necesitan sentarse a los pies de Jesús, para aprender que conocerlo significa vida eterna.—The Youth’s Instructor, 8 de diciembre de 1898. HHD 72.4
La Biblia es nuestra guía en las sendas seguras que conducen a la vida eterna. Dios ha inspirado a hombres que escriban lo que nos presenta la verdad, lo que nos atraerá, y que, si lo practicamos, nos capacitará para recibir y obtener poder moral para situarnos entre las mentes más educadas. La mente de todos aquellos que estudien la Palabra de Dios, se ampliará.—The Youth’s Instructor, 27 de octubre de 1898. HHD 72.5

Entrada destacada

¡Maranata: El Senor Viene!

Nuestro estudio en los siglos futuros, 23 de diciembre Para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bonda...

Satanás les ofrece a los hombres los reinos del mundo si ellos le ceden la supremacía. Muchos hacen esto y sacrifican el cielo. Es mejor morir que pecar; es mejor padecer necesidad que defraudar; es mejor pasar hambre que mentir.—Testimonies for the Church 4:495 (1880). {EUD 121.4}
Pero el perdón tiene un significado más abarcante del que muchos suponen. Cuando Dios promete que “será amplio en perdonar”, añade, como si el alcance de esa promesa fuera más de lo que pudiéramos entender: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos”.19 El perdón de Dios no es solamente un acto judicial por el cual libra de la condenación. No es sólo el perdón por el pecado. Es también una redención del pecado. Es la efusión del amor redentor que transforma el corazón. David tenía el verdadero concepto del perdón cuando oró “Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”. También dijo: “Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”.20 {DMJ 97.2}
https://egwwritings.org/?ref=es_DMJ.97.2&para=175.533


“No cerrará el tiempo de gracia hasta que el mensaje haya sido proclamado con más claridad. La ley de Dios ha de ser magnificada [...] El mensaje de la justicia de Cristo ha de resonar de un extremo de la tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. Esta es la gloria de Dios que terminará la obra del tercer ángel”. Joyas de los Testimonios (JT), vol. 2, (Bs. As.: ACES, 1956), pp. 373,374