Ir al contenido principal

Conflicto y Valor


Falso arrepentimiento, 1 de junio 1 Samuel 15. https://ift.tt/PRMVFu0 Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey. 1 Samuel 15:23. Aterrorizado por la denuncia del profeta, Saúl reconoció su culpa, que antes había negado tercamente; pero siguió culpando al pueblo y declarando que había pecado por temor a él. No era una tristeza causada por su pecado, sino más bien el temor a la pena, lo que movía al rey de Israel... se preocupaba principalmente de conservar su autoridad y retener la lealtad del pueblo... Cuando Samuel se volvió para marcharse, el rey, desesperado por el temor, trabó de su manto para detenerle, pero éste se rasgó en sus manos. Declaró entonces el profeta: “Jehová ha desgarrado hoy de ti el reino de Israel, y lo ha dado a tu prójimo mejor que tú”... Saúl se vanaglorió de su ensalzamiento, y deshonró a Dios por su incredulidad y desobediencia. Aunque al ser llamado a ocupar el trono era humilde y dudaba de su capacidad, el éxito le hizo confiar en sí mismo... Las ofrendas de los sacrificios no tenían en sí mismas valor alguno a los ojos de Dios. Estaban destinadas a expresar, por parte del que las ofrecía, arrepentimiento del pecado y fe en Cristo, y a prometer obediencia futura a la ley de Dios. Pero sin arrepentimiento, ni fe ni un corazón obediente, las ofrendas no tenían valor. Cuando, violando directamente el mandamiento de Dios, Saúl se propuso presentar en sacrificio lo que Dios había dispuesto que fuese destruido, despreció abiertamente la autoridad divina. El sacrificio hubiera sido un insulto para el Cielo. No obstante conocer el relato del pecado de Saúl y sus resultados, ¿cuántos siguen una conducta parecida? Mientras se niegan a creer y obedecer algún mandamiento del Señor, perseveran en ofrecer a Dios sus servicios religiosos formales. No responde el Espíritu de Dios a tal servicio. Por celosos que sean los hombres en su observancia de las ceremonias religiosas, el Señor no las puede aceptar si ellos persisten en violar deliberadamente uno de sus mandamientos. Historia de los Patriarcas y Profetas, 684-686, 688.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA IGLESIA ADVENTISTA NO ES BABILONIA... ¡ES LAODICEA!

Conozco la Iglesia Adventista desde mi niñez (7 años) y sé que es la Iglesia Verdadera. Lo he sabido desde que mis papás encontraron en la Biblia la verdad del sábado y buscaron la iglesia que respetara los mandamientos de Dios y encontraron a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Desde entonces he tenido la convicción de que la Iglesia Adventista es la Iglesia Verdadera, por cuanto es la única que predica la verdad completa y cumple los dos requisitos que ESTÁN ESCRITOS tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento: ANTIGUO TESTAMENTO: “!!A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido.”(Isaías 8:20) NUEVO TESTAMENTO “ Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” (Apocalipsis 14:12) “Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesu