Ir al contenido principal

El Cristo Triunfante


El Cristo Triunfante
Nuestra obra debe ser la proclamación del triple mensaje angélico, 9 de diciembre “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado”. Isaías 58:1. https://ift.tt/1MsjPXG Estamos en el umbral de acontecimientos grandes y solemnes. Las profecías se están cumpliendo. El gran conflicto final será breve, pero terrible. Antiguas controversias renacerán. Surgirán nuevas controversias. Deben transmitirse al mundo las últimas advertencias. Hay un poder especial en la presentación de la verdad en el tiempo presente, pero, ¿por cuánto tiempo ha de continuar? Sólo un poco más. Si alguna vez hubo una crisis, es ahora. Debe hacerse un esfuerzo decidido para presentar el mensaje en forma clara al mundo. El tercer ángel ha de salir con poder. Nadie debiera ignorar o menoscabar esta obra. Se ha de proclamar la verdad al mundo para que vean la luz. Esta es nuestra obra. La luz contenida en el mensaje del tercer ángel es la luz verdadera. La marca de la bestia es exactamente lo que se ha proclamado. Aún no se entiende todo lo relacionado con este asunto y no será plenamente comprendido hasta que se abra el rollo, por lo que se debe realizar una labor solemne en el mundo. La orden del Señor a su siervo es: “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado”. No habrá cambios en las características de nuestra obra. Ha de ser tan clara y distinta como la ha hecho la profecía. No debemos entrar en ningún tipo de asociación con el mundo, suponiendo que así obtendremos mayores ventajas. Todo lo que se haga en esta dirección y que impida el avance de la obra en los sectores que Dios ha señalado, le desagrada al Señor. Ninguna línea de nuestra fe que ha hecho de nosotros lo que somos debiera debilitarse. Tenemos los antiguos hitos de la verdad, la experiencia y el deber. Y ante la vista de todo el mundo, debemos defender con firmeza nuestros principios. Es esencial que se levanten obreros que abran los oráculos de Dios ante toda nación, tribu, lengua y pueblo. Personas de todos los niveles y capacidades, con diversidad de dones, han de ponerse en pie vestidas con toda la armadura de Dios cooperando armoniosamente para alcanzar un fin común. Han de estar unidas en la obra de proclamar la verdad a todas las naciones y pueblos. Cada obrero debe cumplir la labor que se le ha asignado. Hay un vasto campo de acción y al trazar los planes y proyectos, todos deben considerar el objetivo. Todo debe moverse de acuerdo al plan divino. Todo el cuerpo se ha de unir para que cada miembro pueda promover los designios de Aquel que dio su vida por la vida del mundo.—Manuscrito 3, 1899.
¡Visita El Cristo Triunfante!

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA IGLESIA ADVENTISTA NO ES BABILONIA... ¡ES LAODICEA!

Conozco la Iglesia Adventista desde mi niñez (7 años) y sé que es la Iglesia Verdadera. Lo he sabido desde que mis papás encontraron en la Biblia la verdad del sábado y buscaron la iglesia que respetara los mandamientos de Dios y encontraron a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Desde entonces he tenido la convicción de que la Iglesia Adventista es la Iglesia Verdadera, por cuanto es la única que predica la verdad completa y cumple los dos requisitos que ESTÁN ESCRITOS tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento: ANTIGUO TESTAMENTO: “!!A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido.”(Isaías 8:20) NUEVO TESTAMENTO “ Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” (Apocalipsis 14:12) “Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesu...