Ir al contenido principal

En los Lugares Celestiales


El camino de Dios, no el mío, 20 de mayo https://m.egwwritings.org/es/book/1751.1003#1003 Muéstrame, oh Jehová tus caminos; enséñame tus sendas. Encamíname en tu verdad, y enséñame, porque tú eres el Dios de mi salvación; en ti he esperado todo el día. Salmos 25:4, 5. La indicación dada a Moisés era: “Mira, haz todas las cosas conforme al modelo que se te ha mostrado en el monte”. Hebreos 8:5. Aunque Moisés estaba lleno de celo en hacer la obra de Dios y podía disponer de los hombres más hábiles y talentosos para poner en obra cualquier indicación que él les diera, no debía hacer ninguna cosa, una campanilla, una granada, una franja, una cortina o cualquiera de los vasos sino según el modelo que le fue mostrado como el ideal de Dios... Un punto en el cual muchos han errado ha sido el no ser cuidadosos en seguir las ideas de Dios sino las propias. Cristo mismo declaró: “No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre”. Juan 5:19. Tan plenamente se despojó de sí mismo, que no hacía de por sí ningún proyecto o plan. Vivía aceptando los planes de Dios para él, y el Padre le revelaba sus planes día tras día. Si Jesús dependió tan plenamente que declaró: “Todo lo que veo hacer al Padre, eso hago”, ¡cuánto más deberían los agentes humanos depender de Dios en cuanto a la instrucción constante para que sus vidas pudieran ser simplemente la realización de los planes de Dios! Oh, si los mortales sujetos a equivocaciones se contentaran de buscar sabiduría de Dios... Debemos vencer nuestro propio camino. El orgullo, la suficiencia propia deben ser crucificados y el vacío debe ser llenado con el Espíritu y el poder de Dios... ¿Siguió Jesucristo, la Majestad de los cielos, su propio camino? Miradlo en tortura de alma en el Getsemaní, orando a su Padre. ¿Qué es lo que arranca esas gotas de agonía de su santa frente? ... Esta debería ser nuestra actitud—No se haga mi voluntad sino la tuya. Esto es verdadera conversión.—Carta 27, 1892.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA IGLESIA ADVENTISTA NO ES BABILONIA... ¡ES LAODICEA!

Conozco la Iglesia Adventista desde mi niñez (7 años) y sé que es la Iglesia Verdadera. Lo he sabido desde que mis papás encontraron en la Biblia la verdad del sábado y buscaron la iglesia que respetara los mandamientos de Dios y encontraron a la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Desde entonces he tenido la convicción de que la Iglesia Adventista es la Iglesia Verdadera, por cuanto es la única que predica la verdad completa y cumple los dos requisitos que ESTÁN ESCRITOS tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento: ANTIGUO TESTAMENTO: “!!A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido.”(Isaías 8:20) NUEVO TESTAMENTO “ Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” (Apocalipsis 14:12) “Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesu...